Tras dar las gracias a su público por las muestras de apoyo recibidas en estas semanas, les hizo una petición: “Quiero mandar un mensaje bien claro a mis fans: no deben creer nada de lo que oyen y escuchan. Se crean tantas cosas alrededor de mi persona que no estoy para salir y aclarar nada. Tengo que ser inteligente”.
El artista acaba de cumplir cuarenta años, algo que no ha cambiado en absoluto su modo de enfrentarse a la vida. “Vivimos demasiado el futuro o siempre recordando. La idea es disfrutar el presente, vivirlo plenamente. La vida es un milagro y un privilegio. Hay que disfrutar cada instante”. En este sentido tiene claro que su música es su motor. “Hacer lo que hago es mi terapia, lo que me da energía. Mi gasolina es el cariño de la gente y si el público me lo permite, me gustaría entregarles muchos más años de música”.Él mismo se ha involucrado en la producción del álbum, que incluye diez canciones entre las que encontramos títulos como No existen límites, Siento y Lo que queda de mí. “Todos los discos son especiales, así que este es sólo un capítulo más. Mucha gente dijo de mí que estaba más allá… pero estaba en Bora Bora” aseguró con humor. “Mi trabajo consiste en colaborar con los músicos y apoyar en las letras. Para mí es mejor tener una canción con la que te identifiques y que puedas apoyar. Es difícil interpretar canciones que uno no siente”.
Luis Miguel tiene programados conciertos los días 15, 16, 17 y 18 en el auditorio The Colosseum del casino Caesars Palace, en Las Vegas.
En el mes de noviembre comenzará además una gira mundial que arrancará en América del Sur y continuará por España, México y Estados Unidos en el año 2011. “Quiero hacer reír, disfrutar y motivar a la gente” concluyó. Fuente: radiosantafe
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